Warwick, Cambridge; 29 de diciembre de 2010

Nuestro vuelo llegó a Birmingham sobre las 11:30. Fuimos a por el coche de alquiler, que por cierto las oficinas se encuentran fuera del aeropuerto en unas casetas prefabricadas. Después de nuestro primer encontronazo con el ingles (aunque tengo que reconocer que el muchacho ponía de su parte para que se le entienda bien) fuimos a por el coche a lanzarnos a la "gran aventura" de conducir por el otro lado.
Una vez instalados en el coche, con nuestro primer destino introducido en el GPS, nos lanzamos a la carretera, aunque para eso primero había que salir del parking, por el lado correcto, afortunadamente no había más coches en la salida del parking.
Con la extraña sensación de ir sentada a la izquierda y no conducir, mientras mi marido conducía el coche acercándose peligrosamente al arcén/bordillos de la izquierda y con todos los sentidos puestos en no liarla, sobre todo en las rotondas...nos fuimos acercando a Warwick.

El Castillo de Warwick, situado en el condado de Warwickshire a orillas del río Avon se encuentra este enorme edificación, con sus torres y murallas, que fue construido en el año 1068 por Guillermo el Conquistador y utilizado como fortificación hasta el siglo XVII cuando finalizados los conflictos se convirtió en una residencia de campo de los condes de Warwick transformando los terrenos circundantes en hermosos jardines. Ha pertenecido a la familia Greville hasta 1978 que lo vendió al Grupo Tussauds, encargado de rehabilitar y acondicionar todo el complejo para su uso turístico.
Al llegar, aparcamos en el propio parking del castillo y nos dirigimos a la taquilla para comprar nuestras entradas (17,95 £ por persona). Junto a las taquillas habia unos carteles que anunciaban audioguías, pero al preguntar sólo tenian en ingles, francés y alemán, así que nos lanzamos a la visita con el mapa que nos dieron con las entradas.
Decidimos empezar nuestra visita al castillo por las estancias. Hay diferentes puertas por las que iniciar recorridos, los cuales están ambientados en diferentes épocas. Al pasear por los diferentes recorridos, encontramos escenas con maniquís de cera de un gran realismo.

Algunas fotos de la escenas medievales.








Todos los personajes que se ven en estas fotografías son de cera, pero en diferentes estancias del castillo hay actores totalmente caracterizados que van contando diferentes historias.

    

    

Cuando terminamos de recorrer todas las estancias nos dirigimos a recorrer las torres y murallas en cuya entrada ya advierten que es un recorrido en un solo sentido y que hay 540 escalones. Estas son alguna fotos de la vista que hay desde la torre más alta.

Nos quedaron por visitar las mazmorras que parece que son espeluznantes, pero pensamos que no nos daría tiempo a visitarlo todo, además así tenemos escusa para volver.
En cuanto a los espectáculos poco os puedo decir, ya que al ser invierno hacen bastantes menos.
Al terminar la visita nos fuimos a por el coche, pero antes pasamos por las máquinas para pagar el parking, que costaba 5 £/día, metes el dinero y te da una moneda grande que luego te abre la barrera para salir.
De aquí nos dirigimos hacia Cambridge, pero a la llegada ya todo estaba muy oscuro, hacia mal tiempo y estábamos cansados, así que dimos un vuelta en coche y nos fuimos para el hotel.